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  • Outsiders pt 2

    Outsiders pt 2

    Seguimos con el blog de Outsiders, me doy cuenta que no incluí los resultados $ de las medidas de cada CEO, y tampoco lo pienso hacer en esta ocasión, pero quiero que se den la idea de que mantener por 20 años un crecimiento anual mayor al 20% es muy complicado y todos los CEO’s lo han logrado a pesar de pasar por tiempos de crisis económicas.

     
    5. Katherine Graham con el Washington Post
    Es imposible exagerar la falta de preparación de Graham para el puesto de CEO. A los cuarenta y seis años, era madre de cuatro y no había estado empleada regularmente desde el nacimiento de su primer hijo casi veinte años antes. Con la muerte inesperada de su esposo Phil, de repente se encontró a sí misma como la única CEO mujer de una compañía del tamaño de Fortune 500. Naturalmente tímida, estaba comprensiblemente aterrorizada. Esta historia, es mejor conocida del lado humano en que una mujer poderosa puede hacer cosas maravillosas ya que en 1997 sacó su propia autobiografía titulada Personal History, y resultó ganadora del Premio Pulitzer. Lo que menos se aprecia es lo que Graham hizo por sus accionistas. Desde el momento de la salida a bolsa de la compañía en 1971 hasta que renunció como presidenta en 1993, el rendimiento anual compuesto para los accionistas fue de un notable 22.3 por ciento, eclipsando tanto al S&P (7.4 por ciento) como a sus competidores de la industria (12.4 por ciento). Un dólar invertido en el IPO valdría $ 89 para cuando se retiró, frente a $ 5 para el S&P y $ 14 para su grupo de competencia.

    Graham, bajo la tutela de Warren Buffett, demostró ser una excelente capital allocator, aunque poco común. Su enfoque en esta importante área se caracterizó por los bajos niveles de dividendos y deuda de la industria, un alto nivel de recompra de acciones de la industria, relativamente pocas adquisiciones, y un enfoque cuidadoso de los gastos de capital. Bajo Graham, el Washington Post, como Berkshire de Warren Buffet, rara vez vendía negocios operativos y evitaba activamente las escisiones, prefiriendo el modelo de propiedad directa a largo plazo). También pagaba muy bajos dividendos respecto a su competencia y todos los gastos de capital pasaban por un comité que exigía que el retorno de la inversión fuera atractivo. Compraba negocios cuando la competencia estaba en crisis y eso le permitía comprar a precios baratos, y al mismo tiempo cuando su propia acción estaba barata, compraba acciones llegando a  comprar un 40% de las acciones en circulación.
    En cuanto a su liderazgo, trajo a un Outsider editor de Newsweek para ser el editor jefe del Washington Post, y asímismo dedicaba tiempo a atraer al talento joven al periódico, los alineaba y los dejaba en paz para que trabajaran a su manera. Y su decisión más importante en mi opinión, fue dejarse guiar por un inversionista relativamente desconocido en su entonces llamado Warren Buffet de quién hablaremos más adelante y en algún momento ha sido el hombre más rico del mundo.


    6. Bill Stiritz de Ralston Purina

    Desde que llegó a ser CEO, Bill apreciaba plenamente la economía excepcionalmente atractiva de la cartera de marcas de consumo de la compañía y rápidamente reorganizó la compañía en torno a estos negocios, que creía que ofrecían una combinación atractiva de altos márgenes y bajos requisitos de capital. Inmediatamente comenzó a eliminar los fundamentos de la estrategia de su predecesor y sus primeros movimientos involucraron la desinversión activa de negocios que no cumplían con sus criterios de rentabilidad y rentabilidad. Al igual que la mayoría de los CEO’S de este libro, Stiritz inició un plan de recompra de acciones en el que inteligentemente terminó comprando cerca del 60% de las acciones en circulación.

    Compró marcas líderes que pertenecían a grandes conglomerados como Energizer y Continental Baking (los creadores de los Twinkies y el pan Wonder). Al comprar negocios se fijaba en cuánto podrían mejorar las operaciones de las marcas potencialmente compradas gracias al expertís en Marketing y distribución de Ralston, también en la competencia y el crecimiento del mercado. Similar a Bill Anders, Stiritz depurificó el portafolio de marcas y se quedó con las que podía ser líder o tener un market share significativo así como generar altas utilidades a través de esas marcas así como una gran cantidad de dinero resultado de vender las marcas que no eran súper ganadoras.

    Como líder, consideraba que el análisis era una cualidad clave. Era conocido por llegar solo a juntas de negociaciones frente a una multitud de banqueros y abogados con únicamente la ayuda de una libreta de notas. No hacía eventos de relaciones públicos ni se presentaba en eventos filantrópicos porque decía que eso era una pérdida de tiempo. Sin embargo, hacía tiempo para participar en otros consejos corporativos con el afán de aprender y exponerse a nuevas situaciones e ideas.

    7. Dick Smith con General Cinema
    Dick Smith es hijo de un inmigrante Ruso que creó una cadena de cines en Boston. Después de la muerte de su padre tomó la batuta y creció el negocio agresivamente para llevar la cadena de cine a centros comerciales y después en diferentes negocios que no estaban relacionados al cine, creciendo y decreciendo inteligentemente para el beneficio de los accionistas.
    En cuanto a las adquisiciones que hizo, Smith alternaría largos períodos de inactividad con alguna transacción ocasional muy grande. Durante su mandato, haría tres adquisiciones significativas (una a fines de la década de 1960, una a mediados de la década de 1980 y otra a principios de la década de 1990) en negocios no relacionados: embotellado de refrescos (American Beverage Company), venta minorista (Carter Hawley Hale) y publicación (Harcourt Brace Jovanovich). Esta serie de transacciones transformó a la empresa de Drive-in Cinema en un conglomerado de productos de consumo de enorme éxito.
    Como líder dirigió General Cinema con apoyo de lo que llamó el Office of the Chairman, en la que debatían todas las semanas él y tres top executives acerca de cómo hacer las operaciones igual de buenas pero ahorrando en costos. La compensación para los altos ejecutivos fue, en palabras de Smith, competitiva pero no extraordinaria. Sin embargo, la compañía ofreció capital a los gerentes clave a través de opciones (options) y un generoso programa de compra de acciones en el que la compañía equiparó las inversiones de los empleados hasta un nivel máximo establecido.
    Juntos, este grupo de ejecutivos llevó a la compañía a una sucesión ecléctica de nuevos negocios. En cada uno, demostraron ser operadores excepcionales con márgenes líderes en la industria y retornos excepcionales. Smith logró crear un ambiente donde este talentoso grupo de ejecutivos obtuvo autonomía excepcional y se sintieron como propietarios. Smith, con una lágrima en los ojos, lo resumió: “Todos nos divertimos mucho”. Como dijo Woody Ives, el CFO de la compañía sobre su propiedad en acciones “Solo desearía nunca haber vendido una acción.”

    8. Warren Buffet con Berkshire Hathaway
    Berkshire Hathaway era una compañía textil de más de 100 años localizada en Massachusetts, hasta que llegó Warren Buffet.


    Buffet leyó The Intelligent Investor cuando tenía 19 años y se convirtió en un Value Investor y uno de los mejores inversionistas de todos los tiempos. Trabajó para Benjamin Graham 2 años y regresó a Nebraska a manejar un fondo de familia y amigos de $105,000 USD. Durante 13 años obtuvo muy buenos resultados, promediando un crecimiento anual de 30.4% y superando el S&P todos los años. A través de ese fondo, compró a Berkshire Hathaway y vendió sus assets para convertirse en una compañía de inversiones en Negocios. Buffet compró See’s Candies, Buffalo News, una gran porción del Washington Post, GEICO y General Foods.

    Buffet se enfocó en que las empresas que compraba tuvieran pocos gastos operativos y pudieran aumentar de precio con facilidad, no es sorpresa que por eso compró después gran cantidad de acciones de Coca Cola, Apple, Aerolíneas y consumer brands populares. Por ejemplo, compró See’s Candies por 25 millones de dólares y en 39 años esa compañía envió 1.65 billion USD de free cash a Omaha para que ese capital fuera invertido en otros negocios que multiplicaran el dinero, al mismo tiempo que metía su cuchara para que los negocios operaran con mayor eficiencia, como los casos que hemos revisado de Capital Cities y el Washington Post.


    Warren Buffet nos da una lección muy importante de salir de los negocios que no tienen grandes retornos de inversión, mientras que Burlington, la competencia de Berkshire cuando él asumió el cargo creció anualmente .6%, Berkshire tuvo un crecimiento de 27%. Buffet mantiene en promedio sus acciones por más de 20 años, él lo define como inactividad rozando en pereza.


    Cuantas más opciones de inversión tenga un CEO, más probabilidades tendrá de tomar decisiones de alto rendimiento, y esta paleta tan amplia al ser Warren Buffet y su equipo excelentes inversionistas, se ha traducido en una ventaja competitiva significativa para Berkshire.

    En una compañía con más de 270,000 empleados, solo hay 23 en la sede corporativa en Omaha. No hay reuniones de presupuesto regulares para las empresas de Berkshire. Los CEOS que dirigen las compañías subsidiarias de Berkshire simplemente nunca tienen noticias de Buffett a menos que soliciten asesoramiento o busquen capital para sus negocios. Resume este enfoque de gestión como “contratar bien, administrar poco” y cree que esta forma extrema de descentralización aumenta la eficiencia general de la organización al reducir los gastos generales y liberar la energía empresarial.

    Conclusiones
    Siempre hacer cuentas. Ningún CEO aprobaba una inversión sin antes estimar el retorno de tal inversión. Asume escenarios conservadores y así puede que te lleves sorpresas positivas.


    El objetivo final de todo CEO debe ser maximizar el valor por acción, toma en cuenta que entre menos acciones haya, mayor va ser ese ratio. Para eso puedes tomar varias estrategias como: recomprar acciones, en lugar de vender más acciones, financiarte de otras formas y utilizar inteligentemente el valor de tu acción como moneda de cambio.


    Una característica que se repite con todos los Outsiders es el alto grado de descentralización, hay poca gente en las oficinas corporativas, pero demasiada calidad. Toma muy en cuenta el educar a tu gente y elegirla bien para que a largo plazo tu modelo sea funcional. Muchos pensarían que el carisma es una característica de todo CEO, sin embargo estos Outsiders son más que nada comprensivos y excelentes lectores de situaciones, capaces de maximizar recursos. De alguna forma, los Outsiders son como cocodrilos con paciencia, se mantienen estáticos durante un buen tiempo y cuando se les presentaba una buena oportunidad daban una gran mordida y se comían a otro animal de casi la mitad de su tamaño de un solo bocado. Dicho de otra forma, bailan cuando les ponen su canción, no siempre, y así es como más se lucen. Además cada uno de ellos tenía un enfoque de largo plazo para la empresa.

    The Outsider’s Checklist
    1.El proceso de asignación debe ser dirigido por el CEO, no delegado al personal de finanzas o desarrollo empresarial.
    2. Comience por determinar la tasa de obstáculo: el rendimiento mínimo aceptable para proyectos de inversión (una de las decisiones más importantes que toma cualquier CEO). Comentario: las tasas de obstáculo deben determinarse en referencia al conjunto de oportunidades disponibles para la empresa, , y generalmente debe exceder el costo combinado del capital y el capital de la deuda (generalmente en los intermedios o superiores).
    3. Calcule los rendimientos de todas las alternativas de inversión internas y externas, y clasifíquelas por rendimiento y riesgo (los cálculos no necesitan ser perfectamente precisos). Use suposiciones conservadoras. Comentario: Los proyectos con mayor riesgo (como las adquisiciones) deberían requerir mayores retornos. Tenga mucho cuidado con el adjetivo estratégico: a menudo es un código corporativo para bajos rendimientos.
    4. Calcule el rendimiento de las recompras de acciones. Exigir que los retornos de adquisición superen significativamente este punto de referencia. Comentario: Si bien las recompras de acciones fueron una fuente importante de creación de valor para estos CEOS externos, no son una panacea. Las recompras también pueden destruir el valor si se hacen a precios exorbitantes.
    5. Concéntrese en las declaraciones después de impuestos y ejecute todas las transacciones por asesor fiscal.
    6. Determine niveles de efectivo y deuda aceptables y conservadores, y haga que la empresa permanezca dentro de ellos.
    7. Considere un modelo organizativo descentralizado. (¿Cuál es la proporción de personas en la sede corporativa con respecto al total de empleados? ¿Cómo se compara esto con su par?
    8. Conserve el capital en el negocio solo si tiene confianza en que puede generar retornos con el tiempo que estén por encima de su tasa de obstáculo.
    9. Si no tiene posibles proyectos de inversión de alto rendimiento, considere pagar un dividendo. Sin embargo, tenga en cuenta que las decisiones de dividendos pueden ser difíciles de revertir y que los dividendos pueden ser ineficientes en cuanto a impuestos.
    10. Cuando los precios son extremadamente altos, está bien considerar vender negocios o acciones. También está bien cerrar unidades de negocios de bajo rendimiento si ya no son capaces de generar retornos aceptables.

     

    Angel Escamilla Rdz

     

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    Outsiders

    ¿Quién es el mejor CEO de la historia? Si buscas esto en Google la respuesta va ser Larry Page, porque pues el creo Google, pero otra respuesta común podría ser Jack Welch, el CEO de General Electric que básicamente es el estereotipo de un buen CEO, un rockstar que anda en jets privados  haciendo negocios, cortando listones de inauguración  y juntándose con todo tipo de personas con tal de convencer en que su compañía va muy bien. Sin embargo a ciencia cierta el trabajo de un CEO es asegurarse de que la compañía le esté trayendo más valor a los accionistas que depositaron su confianza y su dinero. Jack Welch hizo un excelente trabajo en ambas tareas, sin embargo, si comparas su trabajo con el de su competencia o el resto de los CEO’s de su época, este no resulta tan maravilloso, puesto a que entró y salió en un periodo de bonanza económica.

    Este libro trata 8 historias de CEO’s que fueron CRACKS en la estrategia más efectiva para asegurarse de que los retornos de inversión sean altos y mayores que la competencia. Hablo del Capital Allocation.

    Capital Allocation- the process of deciding how to deploy the firm’s resources to earn the best possible return for shareholders.

    Estos 8 Outsider CEOS, compartían características muy interesantes como: Llevaban un estilo de vida muy frugal, a veces incluso legendariamente frugal, humildes, analíticos, y eran comúnmente subestimados. Le dedicaban tiempo a sus familias y seguido salían temprano de la oficina para atender a eventos escolares o apoyar a algunos amigos. Sobra decirlo, el papel de rockstars como CEO’s que hablan con la prensa, dan discursos en cámaras de comercio, y salían en revistas como Forbes o Fortune, nunca lo tomaron.

    Estos ocho CEOS no eran visionarios  ni carismáticos, ni se sentían atraídos por grandiosos pronunciamientos estratégicos. Tenían un temperamento práctico y agnóstico, y desconectaban sistemáticamente el ruido de la sabiduría convencional al fomentar una cierta simplicidad de enfoque, una cierta aspereza en la cultura de la organización y su comunicación. Los científicos y los matemáticos a menudo hablan de la claridad “al otro lado” de la complejidad, y estos CEOS, todos los cuales eran expertos cuantitativamente (eran ingenieros antes que administradores), tenían un genio para la simplicidad, para cortar el desorden de pares y ahorrarse plática para concentrarse en las características económicas centrales de sus negocios.

    1. Tom Murphy de Capital Cities
    Cuando Tom Murphy comenzó como CEO, su compañía era 16 veces más pequeña en capitalización relacionada con CBS, la emisora ​​más grande, cuando renunció como CEO era 3 veces más grande. ¿Cómo sucedió esto? CBS emitió acciones e hizo compras agresivas en otros negocios que no estaban relacionados con los medios de comunicación, mientras que Capital Cities tenía un enfoque diferente. Realizó pocas adquisiciones importantes, mejoró sus operaciones, pagó deudas y se benefició de la mayor escala de operaciones mientras se mantenía comprometida a permanecer como una empresa descentralizada.

    Daniel Burke fue clave para el crecimiento de  Capital Cities. Vino de trabajar en Jell-O sin experiencia en medios pero con un enfoque creativo e inteligente para reducir costos y producir resultados eficientes. Una vez que las mejores prácticas y los recursos humanos fueran justos y ajustados a lo necesario, a Murphy se le ocurrió una estrategia para mejorar el valor para los accionistas, como pagar deudas, recomprar acciones o hacer adquisiciones más grandes con el fin de otorgar mayores dividendos en el largo plazo. Después de hacer la gran adquisición, el ciclo comienza nuevamente con Burke trabajando en la operación eficiente de la nueva adquisición y adaptando las mejores prácticas y recursos humanos a la nueva compañía. Cada estación o negocio local rara vez recibía una llamada de la sede central si los costos se mantenían bajos y los números funcionaban bien, por supuesto, siempre había una inversión en tecnología para seguir siendo competitivos y líderes en el ámbito local.

    Las adquisiciones no siempre fueron una tarea fácil. Al principio, cuando la compra era otra emisora ​​local y solo se compartían las mejores prácticas en reducción de costos para aumentar el valor para los accionistas, podría no haber sido tan difícil, pero a medida que las adquisiciones comenzaron a crecer, un nuevo modelo operativo y una cultura de organización surgió. Muchos ejecutivos de la nueva compañía se fueron en el primer año debido a la cultura más exigente, dejando espacio para que otro personal de diferentes divisiones mejorara su carrera (como Bob Iger, ahora presidente de Disney) y resultando en una extraordinaria y fuerte cultura de empresa. Incluso hay una historia sobre un cantinero que compró acciones de Capital Cities en la década de 1970 e hizo una enorme cantidad de dinero porque entre todos los demás eventos corporativos en los que trabajó, Capital Cities era la única compañía donde no se podía saber quiénes eran los jefes.

    Capital Cities creció de ser una emisora local con unos cuantos periódicos a convertirse en el gigante del entretenimiento que ahora es Disney, después de haber pasado por varias administraciones. En lo personal lo más destacable de esta empresa pienso que es la excelente cultura organizacional que se creo desde un principio.

    2. Henry Singleton con Teledyne

    Nacido en 1916 en el pequeño Haslet, Texas, Singleton fue un matemático y científico altamente realizado que nunca obtuvo un MBA. En cambio, asistió al MIT, donde obtuvo títulos de licenciatura, maestría y doctorado en ingeniería eléctrica. También estuvo a 100 puntos de llegar al nivel de gran maestro en ajedrez, en 1950 inventó un sistema de ubicación de inercia que es utilizado hasta la actualidad en aeronaves comerciales y militares.

    Al formar Teledyne a la edad de 43 años se enfocó en comprar compañías de nicho con grandes márgenes de operación.

    One of the most important decisions any CEO makes is how he spends his time- specifically, how much time he spends in 3 key activities. Management of operations, capital allocation, and investor relations.

    En cuanto a su administración, se interesaba en los resultados de cashflow e ingreso neto por unidad de negocio. Tenía juntas directivas con poca gente que tuviera interés económico en la compañía. Buscaba la descentralización de operaciones al máximo y compraba acciones de su propia empresa cuando estaba “barata” y vendía las unidades de negocio después de desarrollarlas y cuando su valor dejaba de ser tan atractivo como lo que tenían en la mira.

    Al comprar las acciones de regreso maximizaban el flujo de efectivo incurrriendo a deuda que les salía barata y tenía el capital en donde fuera más probable que fuera a florecer.

    Henry creía que las relaciones con los inversionistas eran un uso ineficiente del tiempo, y simplemente se negaba a proporcionar orientación trimestral sobre ganancias o aparecer en conferencias por más que fueran relacionadas a la industria. Este era un comportamiento muy poco convencional en un momento en que sus compañeros más serviciales a menudo estaban en la portada de los principales negocios de las revistas. Su mayor preocupación laboral era el capital allocation ya que se veía a sí mismo como un inversionista.

    3. Bill Anders de General Dynamics.

    Si pudiera definir la historia de Bill en un tweet sería algo así:

    https://twitter.com/angel_esrdz/status/1267582715962036224?cxt=HHwWgMC8xfTwrZcjAAAA

    Bill se graduó con un título en ingeniería eléctrica de la Academia Naval en 1955 y sirvió como piloto de combate de la fuerza aérea durante la Guerra Fría. Obtuvo un título avanzado en ingeniería nuclear en 1963 y fue uno de los catorce hombres elegidos de un grupo de miles para unirse al programa astronautas de élite de la NASA. Después de orbitar la luna ya no le asustaba ningún problema mundano por lo que fue elegido por un comité para seguir como CEO de General Dynamics.

    General Dynamics era una empresa que le vendía armas y naves al gobierno de los Estados Unidos. Después de que la guerra fría terminó, la industria empezó a ver un declive.

    Su estrategia de cambio para General Dynamics se basó en una visión estratégica central: la industria de defensa tuvo un exceso de capacidad significativo después del final de la Guerra Fría. Como resultado, Anders creía que los actores de la industria debían actuar agresivamente para reducir sus negocios o crecer a través de la adquisición. En este nuevo entorno, habría consolidadores y consolidados, y las compañías debían averiguar rápidamente a qué pertenecían. Anders creía que General Dynamics solo debería estar en negocios donde tenía la posición de mercado número uno o número dos. También la compañía se quedaría en los negocios que conocía bien, específicamente si eran negocios comerciales.

    Para el primer año, había generado 5 billones de USD. Lo primero que hizo fue encontrar los excesos que tenía la compañía, encontró que había piezas duplicadas de inventario muy caro y empezó a haber una estrategia más lean ya que su inventario era muy caro. Compraba assets que le eran altamente redituables y se metía en concursos del gobierno por negocios que valieran la pena ($) en lugar de a todos. Se descentralizaron tanto las operaciones que para cuando dejó de ser CEO, sólamente había dos personas entre el CEO y la cabeza de una unidad de negocio, mientras que los empleados aumentaron, en el HQ de General Dynamics había solo 1/4  del personal.

    El sucesor de Bill siguió su camino e hizo una adquisición que era igual a la mitad de los ingresos operativos y esa decisión probó ser muy exitosa en el futuro. Después de que saliera Bill de General Dynamics, el resto de las compañías de defensa siguieron su ejemplo y readaptaron sus estrategias para enfocarse en los productos de los que fueran líderes.

    4. John Malone de TCI
    Malone le trajo una inusual combinación de talentos a TCI como Capacidad analítica excepcional, sofisticación financiera, conocimiento técnico y audacia. Su mandato, sin embargo, tuvo un comienzo difícil. TCI tenía una deuda equivalente a 17 veces los ingresos que tenía debido a que se apalancaban del hecho de que las leyes permitían la depreciación de las radiobases y poder seguirlas utilizando, llevando a que se endeudaran las compañías con tal de ganar la carrera en infraestructura y tener mayor ventaja competitiva en el futuro.

    Malone se enfocó en que los costos fueran los más mínimos, siendo la compañía líder de su industria, las oficinas corporativas tenían una secretaria y los escritorios estaban sobre piso de Formica. A través de una cultura de frugalidad, TCI tuvo los mejores márgenes de la industria y se ganó la reputación de una compañía que sobreentregaba resultados. Conforme fue creciendo dejó de endeudarse con los bancos y empezó a acceder a deuda barata a través de compañías de seguros. Malone dejó de tomar en cuenta los Earnings Per Share y acuñó el término EBITDA (EARNING BEFORE INTEREST, TAX, DEPRECIATION AND AMORTIZATION) ya que casi nunca mostraba un Net income pero sí estaba desarrollado economía de escala al crecer en activos fijos.

    Era muy cuidadoso con las ofertas de acciones de la compañía y las hacía coincidir con máximos históricos para que no se vendiera nada en descuento del valor real. TCL no era pionero en desarrollo de nuevas tecnologías sino que prefería esperar que la competencia hiciera innovaciones y después adoptarlas sin que hubiera costo extra por el desarrollo inicial. Su regla para comprar una compañía, y compró muchas, era: sólamente compra compañías cuyo precio sea menor a 5 veces el cashflow después de descontar los beneficios inmediatos que traería esa compra.

    A pesar de su enfoque cool, calculador, parecido a Spock de Star Trek, Malone también tuvo éxito en crear una cultura muy fuerte y en generar una gran lealtad de los empleados. Lo hizo al proporcionar una poderosa combinación de incentivos y autonomía. TCI tenía un agresivo programa de compra de acciones para empleados en el que la compañía equiparaba las contribuciones de los empleados e invitaba a participar de todos los niveles de la organización. Muchos de los primeros empleados (incluida la primera secretaria de Malone) se convirtieron en millonarios, y esta cultura generó una tremenda lealtad: en los primeros dieciséis años de Malone al mando, ni un solo alto ejecutivo dejó la empresa.

    Todavía faltan 4 CEO’s pero los vamos a ver la próxima semana… Paz.

    Angel Escamilla Rdz