En mis 24 años de vida he pasado por un total de 6 entrevistas de trabajo. En todas me han hecho esa típica pregunta de dime 3 fortalezas y 3 debilidades tuyas. Según recuerdo, he contestado cosas diferentes en cada una de ellas. En la primera basé mi respuesta en que tenía inteligencia, energía y ganas de aprender, y de debilidades expresé mi nula experiencia laboral, miedo a equivocarme y ser muy estricto conmigo mismo. Como dato, en esa entrevista me fue bien y después me contrataron, pero no baso el resultado en esa pregunta, en general fue una buena entrevista. Para la segunda entrevista me preparé muy bien porque estaba muy entusiasmado por el trabajo, estaba algo fuera de mi alcance dado a que era una posición de analista financiero y yo seguía en 5to semestre de Universidad, tuve una excelente entrevista y en verdad pensé que me iban a contratar, pero no fue así. Sin embargo, dí en el clavo en todas las preguntas y estudié las respuestas previamente, para mis fortalezas dije algo así como: “Soy campeón de ajedrez, soy muy analítico, creativo y me gusta siempre estar un paso adelante, por eso estoy aquí a pesar de que voy a la mitad de mi carrera universitaria”. Mientras que para las debilidades dije que era muy estricto conmigo mismo, me faltaba más experiencia laboral, y creía que mi persistencia podía ser un arma de doble filo.
No sé como pasé la tercer entrevista, en el primer filtro apenas y pude hablar, estaba pálido y me sentía muy mal físicamente pero gracias al cielo que pasé ese filtro porque para la siguiente entrevista ya me sentía un poco mejor y es el trabajo en el que estoy actualmente donde descubrí mi pasión como Project Manager. Además los líderes y el equipo con el que estoy actualmente han impulsado mi desarrollo personal y profesional a un nivel al que no creía que fuera a llegar tan rápido. A pesar de ser Intern, me han dado la oportunidad de tener experiencias de Project Manager y me siento tan útil como cualquier administrador de proyectos, he organizado juntas con dueños de comercializadoras internacionales, he tratado con especialistas en moldes, ingenieros con certificación Black Belt, proveedores buenos, malos y muy malos, Buyers especialistas en distintos commodities, entre muchas otras cosas. En mi entrevista para este trabajo que tanto me encanta también me hicieron la pregunta. Mi respuesta fue en inglés y tosiendo ya que estaba recuperándome de la gripe más fuerte que había tenido en el año, dije algo así como “I’m very smart and kind and as an opportunity, even though I can be a friend with almost anyone, I would like to be a stronger leader, I mean to have more presence in a large group”. No creo que mi respuesta haya sido muy buena, pero sí fue muy sincera y se dieron cuenta de eso, la persona que ahora es mi jefe me dijo: “no pues aquí te va tener que salir lo fuerte sí o sí”. El resto es historia.
Notando que no había consistencia en lo que decía que eran mis fortalezas, me recomendaron un libro llamado Conozca sus fortalezas 2.0 de Tom Rath. Es un libro que lo recomiendo ampliamente para líderes de equipos y para aquellas personas que están en proceso de autoconocimiento. El libro ordena en orden alfabético 33 fortalezas, primero busca definir ese tipo de fortaleza, después menciona ejemplos en base a testimonios de personas, luego menciona ideas para maximizar esa fortaleza, y por último brinda ideas de cómo trabajar con una persona que posee esa fortaleza. Para sacarle más provecho a mi experiencia de lectura hice una hoja de cálculo en la que ponderé mis fortalezas junto con una explicación. Según mi ponderación poseo 22 de las 33 fortalezas mencionadas, pero las más distintivas que fueron con las que más me sentí identificado fueron nadamás 5, y de esas 5 fortalezas hablaré a continuación.
Aprendedor
Sin importar el área de estudio o tema, a alguien aprendedor le encanta aprender, sentirse liberado de la ignorancia le genera paz. No es solamente alguien que acumula información como lo es alguien con la fortaleza Contexto, aprendedor disfruta del proceso de aprendizaje, el equivocarse y el practicar las primeras veces. Si se encuentra en un entorno en el que no está aprendiendo nada nuevo, esta persona se va a aburrir y se sentirá impaciente. Se recomienda que la persona con este atributo, desarrolle formas de darle seguimiento a su aprendizaje como indicadores semanales o mensuales. Se recomienda buscar en los que la nueva información sea una constante. Si logras enfocar el aprendizaje en una materia, fácilmente puedes volverte un experto.
Competitivo
La gente competitiva se basa en la comparación con las demás personas, para maximizar esta fortaleza será mejor que se compare con las mejores personas. El desempeño de ellos mismos respecto al de los demás es el que más les importa. Su espíritu competitivo lo puede orillar a no entrar en competencia cuando siente que no hay posibilidad de ganar, ¡mucho cuidado con eso! Muchas veces la gente que es deportista de alto rendimiento tiene esta característica, lo que hacen no es solamente por el amor al arte sino que sienten fascinación al ser consideradx el/la mejor de un grupo. Como recomendación, mantente en equipos de trabajo donde la gente sea muy buena, de otra forma, si tú eres el mejor y no te sientes retado, difícilmente vas a poder liberar tu mayor potencial. Cuando resultes ganador en una contienda, analiza qué es lo que te hizo ganar así como lo qué te pudo hacer perder, y por supuesto, celebra tus victorias. El ser competitivo a veces puede malinterpretarse como que no valoras a las demás personas, asegúrate de informar a la demás gente que la aprecias y que tienes una naturaleza competitiva. Si vas a trabajar con alguien competitivo, utiliza lenguaje retador y su sangre va fluir más rápido; si es tu compañero y lo ves perder, déjalo un momento para que reflexione y después puedes proceder a animarlo a otra oportunidad de ganar.
Disciplina
La disciplina no es solamente el primer valor del colegio en el que estuve, es también una de mis mayores fortalezas. Si hay algo que me apasiona, ordeno y planifico y me mantengo al margen del plan, a veces con titubeos, pero siempre teniendo en mente y esforzándome en seguir el plan. Hablando en tercera persona, la gente con disciplina ansía el control de las situaciones y todo lo que le brinde sensación de control como plazos, y estructura en un plan. Las recomendaciones que hay para estas personas es reconocer que no todas las personas son disciplinadas, ignora los medios y enfócate en los resultados con las personas que sientas que son indisciplinadas. Busca mejorar la eficiencia en tus acciones, la combinación de disciplina y eficiencia es poderosa. Si te toca trabajar con alguien que cuenta con esta fortaleza, procura darle aviso previo de los plazos, trata de no sorprenderla con cambios repentinos y llega con un proyecto previamente organizado.
Individualización
Este atributo se describe de una persona que tiene talento para identificar las cualidades únicas de cada persona. Esta persona observa detenidamente cómo es que piensa una persona, qué le gusta, qué le motiva y cómo reacciona ante ciertas eventualidades, por eso es que elige los mejores regalos de cumpleaños. Esta persona se adapta a las diferentes actitudes de las personas, logra identificar sus puntos fuertes y disfruta sacar lo mejor de cada quien. Alguien con esta fortaleza puede ser un gran “team-builder” ya que puede adaptarse y llevar una buena relación con cada persona y unir las fortalezas de cada quién para tener mejores resultados en un proyecto. Se recomienda que en presentaciones grupales asocie experiencias propias con las personas que estén entre el público, de esta forma su mensaje va llegar más lejos que si utiliza información genérica. Si reconoces que alguien tiene esta fortaleza, puede ser muy útil cuando estés teniendo problemas con otro compañero, ya que puedes hablar con él o ella y tendrá la perspectiva de las dos personas y podrás solucionar el problema de una manera proactiva.
Maximizador
Alguien maximizador se puede definir como una persona que transforma algo bueno en algo extraordinario. Al encontrar una fortaleza se siente obligado a alimentarla, refinarla, y extenderla hacia la excelencia. Es alguien muy exigente que si se encuentra algo bueno lo mejorará hasta sentirse orgulloso de lo que ha hecho. La mejor recomendación que se le puede dar a una persona maximizador (a) es el establecer indicadores de desempeño. Estos indicadores pueden ayudar en demostrar más de las fortalezas que cree. La combinación de alguien maximizador y alguien restaurador puede ser bastante productiva, así que te recomiendo buscar a alguien de este estilo para que crezcan juntos en un proyecto. Finalmente, si trabajas con alguien maximizador, es importante que consideres que este tipo de personas tiende a ser muy perfeccionista, si te centras mucho en sus defectos, vas a desesperar a la persona muy pronto y profundamente.
Por último, quiero enfatizar que es igual de importante saber tus fortalezas que conocer tus debilidades. No porque creamos que somos muy buenos quiere decir que hay que ignorar en lo que no somos tan buenos. Vivimos en un mundo cada vez más competitivo y especializado que cada vez vale más la pena el maximizar nuestras fortalezas y mitigar de alguna forma nuestras debilidades. Para empezar hay que dejar de ver debilidades y pensar en áreas de oportunidad, y ser oportunistas y mejorar en ese aspecto.
Angel Escamilla